De vez en cuando di la verdad para que te crean cuando mientes. Jules Renard
"Ocultar la verdad es la forma más sutil de mentir"
"Mejor llorar por escuchar la VERDAD, que sonreír engañado por las mentiras"
"El que miente, nunca cambia. Sólo mejora su estrategia"
"Con una mentira suele irse muy lejos, pero sin esperanzas de volver"
Proverbio judío
"Las mentiras más crueles son dichas en silencio"
La mentira nunca vive hasta llegar a vieja. Sócrates
"La mentira y la verdad no pueden vivir en paz"
"El que miente una vez, miente siempre"
"El respeto por nosotros mismos y por nuestros valores debe anteponerse
a cualquier temor o deseo de agradar" Dr. Walter Riso
"Una forma muy común de falta de respeto es la desconfianza y
suele pasar inadvertida" Walter Riso
" Quien quiere mentir, engaña y el que quiere engañar, miente" Mateo Alemán
"El mentiroso tiene dos males: que ni cree ni es creído" Baltasar Gracián
"Cuando engañas una persona, no es porque sea tonta ni boba, es porque confiaba en ti más de lo que te mereces"
"No hay mentira más perjudicial que la verdad disfrazada"
"Cuando te mienten no sólo te esconden la verdad, pero tambien te demuestran la cobardía"
A la larga todo se sabe.
De mentir, la mentira
Es común, como tan fácil y como tan vergonzoso Se puede observar
con frecuencia Y a pesar de ser una practica que no trae
beneficio, aunque bien depende
de las intenciones, motivos, hacia quien o por que son dirigidas.
No debe ser motivo de orgullo. No DEBE.
Y yo estoy clara que si busco en mi memoria por ahí asoma
el recuerdo de aquella vez que fue necesario mentir.
"Una mentira piadosa", así le decía. La justificación para no sentir pesar.
En realidad la mentira en algún momento dado puede ser útil,
apremiante, ineludible, la exculpación la hace objetiva.
No obstante todas las mentiras salen a la luz, con el tiempo
todo se sabe independiente del subterfugio.
De mas esta mencionar la decepción y el
dolor que derivan. Destruyen la confianza y provocan desilusión.
Algunos lo hacen una y otra vez , hay quien de tanto hacerlo
llegan a creérselo como cierto, suene tal vez irónico.
Es incómodo y difícil creer en quien ya te ha mentido,porque
pierde credulidad Y Llega el momento que uno dice
basta ya, jura que no vuelve a fiarse.
Pero eso es una mentira mas, siempre hay oportunidades,
claro si esa otra persona es importante para ti,
Entonces encima sentimos lastima
y claro hay que darle el beneficio de la duda. Pero con cautela.
De poco a poco y día a día. Es a prueba.
Aferrarnos, convencernos que hemos estado equivocados.
Sin embargo no se puede ir con la armadura de la desconfianza siempre.
Aunque a la larga llega el momento que un solo gesto activa esa señal de alerta
que pueda encausar la ruta de acción.
A todo esto entender que volver a confiar se da con el tiempo,
y hay que tener paciencia y perseverancia,
es un proceso gradual y lento, si es que se logra recuperar.
Y mas importante, comprender que hay que perdonar
para poder segur adelante, y perdonar porque que estas listo para volver
a intentarlo sin renunciar a tu amor propio, a tu esencia y a tu paz.
Y si no es a la altura de las expectativas, tomar acción correctiva y
re-dirigir esfuerzos.
Porque en vano ningun esfuerzo va a ser.
©eмđρeи.вłøgšρøт.com
CUENTO
El árbol de la mentira
La Verdad y la Mentira se pusieron a vivir juntas una vez y, pasado cierto tiempo,
la Mentira, que es muy inquieta, le propuso a la Verdad que plantaran un árbol,
para que les diese fruta y poder disfrutar de su sombra en los días más calurosos.
La Verdad, que no tiene doblez y se conforma con poco, aceptó la propuesta.
Cuando el árbol estuvo plantado y empezó a crecer frondoso,
la Mentira propuso a la Verdad que se lo repartieran entre las dos,
cosa que agradó a la Verdad.
La Mentira, dándole a entender con razonamientos muy bellos y
bien construidos que la raíz mantiene al árbol, le da vida y,
por ello, es la mejor parte y la de mayor provecho, aconsejó a la
Verdad que se quedara con las raíces, que viven bajo tierra,
En tanto, ella se contentaría con las ramitas que aún habían de salir y
vivir por encima de la tierra, lo que sería un gran peligro,
pues estarían a merced de los hombres que podrían
cortarlas o pisarlas, cosa que también podrían hacer los animales y las aves.
Además, le dijo que los grandes calores
podrían secarlas, y quemarlas los grandes fríos; por el
contrario, las raíces no estarían expuestas a estos peligros.
Al oír la Verdad todas estas razones, como es bastante
crédula, muy confiada y no tiene malicia alguna, se dejó
convencer por su compañera la Mentira; creyò que era verdad
lo que le decía.
La Verdad se metió bajo tierra para vivir, pues allí estaban las raíces,
que ella había elegido, y la Mentira permaneció encima de la tierra,
con los hombres y los demás seres vivos.
Y como la Mentira es muy lisonjera, en poco tiempo se ganó la admiración
de la gente, porque su árbol comenzó a crecer y a echar
grandes ramas y hojas que daban fresca
sombra; también nacieron en el árbol flores muy hermosas,
de muchos colores.
Al ver un árbol tan hermoso, muchas personas empezaron a reunirse
junto a él muy contentas; gozaban de su sombra y de sus flores;
la mayoría de la gente permanecía allí,
e incluso quienes vivían lejos se recomendaban el árbol de la
Mentira por su alegría, sosiego y sombra fresca.
Así,la Mentira se sentía muy honrada y
era muy considerada por quienes buscaban siempre su compañía:
al que menos se acercaba a ella y menos sabía de sus artes,
todos lo despreciaban,
e incluso él mismo se descalificaba.
Mientras esto le ocurría a la Mentira, que se sentía muy feliz, la triste y
despreciada Verdad estaba escondida bajo la tierra,
sin que nadie supiera de ella ni quisiera ir a
buscarla. Viendo la Verdad que no tenía con qué alimentarse,
sino con las raíces de aquel árbol que la Mentira le aconsejó tomar como suyas,
y a falta de otro alimento, se puso a
roer y a cortar para su sustento las raíces del árbol de la Mentira
Aunque el árbol tenía ramas gruesas, hojas muy anchas que daban mucha
sombra y flores de colores muy alegres, antes de que llegase a dar su fruto fueron cortadas todas sus raíces, pues tuvo que comérselas la Verdad.
Cuando las raíces desaparecieron, la Mentira estaba a la sombra de su árbol
con todas las personas que aprendían sus artimañas,
se levantó viento y movió el árbol que, como no tenía raíces, muy fácilmente cayó derribado sobre la Mentira, a la que hirió y quebró muchos huesos,
así como a sus acompañantes,
quienes resultaron malheridos.
Entonces, por el vacío que había dejado el tronco, salió la Verdad,
que estaba escondida, y cuando llegó a la superficie vio que
la Mentira y todos los que la acompañaban estaban muy maltrechos.
Habían recibido gran daño por haber seguido el
camino de la Mentira.
La Mentira tiene ramas muy grandes y sus flores, que son sus palabras,
pensamientos o halagos, son muy agradables y gustan mucho,
pero son efímeros y nunca llegan a
dar buenos frutos. A quienes usen de los halagos y engaños de la mentira,
evítalos cuanto puedas, porque cuando se encuentren más
confiados, les sucederá como al árbol de la Mentira y a quienes se cobijaron bajo él.
Aunque muchas veces en nuestros tiempos la verdad sea
menospreciada, abrazate a ella. La verdad siempre te hará libre.
Desconocido